Escenario 1:
Teléfono muerto. No recibes ni un mensaje de Club Movistar. Ni una llamada de tus padres. Ni siquiera hace sonido de descarga de batería. Está en vida vegetal...
Decides finalmente pararte del sofá y te propones hacer ejercicio, decidiendo - claro - dejar el teléfono guardado.
Escenario 2:
Llegas a tu casa y ves 15 llamadas perdidas.
10 son de tu mamá,
2 son de números desconocidos,
1 de tu mejor amiga a quien tenías días sin escuchar y,
1 de él...
No obstante, te encuentras con 5 mensajes de texto y 3 de voz.
Los mensajes de texto eran: 1) de tu mamá "hija te estoy llamando" (tú: duh!), "contéstame" y "¿estás bien?" (tú piensas: sí mamá, estoy secuestrada pero los tipos son burda de panas, ¿ves?, arg!); 2) de tu amiga diciéndote "estás perdida, ¿quieres tomarte un café/cerveza tipo YA?"; 3) uno último de ese personaje fastidioso que nunca se identifica, te manda cursilerías o mensajes como "¿qué haces?"... (doble ARG!!!)
En cuanto a los mensajes de voz: uno es de tu papá diciéndote "hija tu mamá me dijo que te llamara... a ver..."; otro es de uno de los números desconocidos (supones) para ofrecerte el trabajo que estabas esperando para dejar el que tienes (de una buena vez!) y el cual OBVIO estabas esperando; y en el último mensaje, (en tu última y pequeña esperanza que fuera de él diciéndote lo mucho que ha pensado en ti últimamente o en que quisiera verte para.. hablar y ya.. o... ¡para simplemente verte, coññññ!), en ese mensaje ¡sólo escuchas cuando cuelgan!
Aguantas la rabia por 5 segundos y piensas que quizá fue él quien colgó (sí! al fin se atrevió a llamar y seguro que no le gusta hablar con la contestadora). Al fin y al cabo tienes una ligera sonrisa dibujada en tu cara...
Llamas a tu amiga para ver si aún sigue tomándose algo pero ella decidió irse a su casa puesto que no contestaste (ouch!)...Seguidamente llamas a tu mamá quien te dice que sólo quería SALUDARTE y que además cambies el mensaje de la contestadora porque no se escucha casi y POR ESO COLGÓ!!!...(recontramega ouch!)
Escenario 3:
Sonrisa completamente borrada. Te das cuenta que o b v i a m e n t e no fue él quien colgó. Quizá hasta llamó por equivocación. Suspiras y continúas tu vida y decides NO volver a hacer ejercicios por un buen tiempo y ahora ¡hasta vas al baño con el teléfono!!...y nuevamente: Nadie llama.